Dios asume toda la responsabilidad en cuanto a nuestras necesidades, si lo obedecemos. Job 42: 7 - 17 Job 42:5 De oídas había oído hablar de ti,pero ahora te veo con mis propios ojos.
   
 
  El poder de la oración

 

MATEO 7:  7 - 11
Jesús conocía la importancia de la oración y la practicaba con regularidad. Frecuentemente se apartaba de las multitudes para tener comunión con Dios y recibir la guía y la fortaleza necesaria para hacer la obra de Su Padre.
Al enseñar en cuanto al poder de la oración, Jesús utilizó tres palabras para ayudarnos a orar con efectividad:
Pedir: Debemos venir a Dios con nuestras peticiones. Al hacerlo, estamos reconociendo tanto nuestra necesidad, como la capacidad de Dios para darle respuesta. Jesús nos asegura que toda petición será concedida, si está de acuerdo con lo mejor que el Padre Celestial tiene para nosotros y para otras personas.
Buscar: A veces el Señor pide que nos involucremos en la situación por la que estamos orando. Por ejemplo, podemos pedirle ayuda para encontrar un nuevo empleo. Pero Él quiere que no sólo busquemos su dirección y su sabiduría, sino también que demos pasos prácticos para encontrar lo que está a nuestro alcance. Si obedecemos su dirección, Dios promete que encontraremos la respuesta.

Llamar: Al cumplir con el plan de Dios, encontraremos obstáculos a lo largo del camino. Para poder vencerlos, es necesaria la oración sostenida y persistente. El llamar implica un grado de fuerza que se aplica para que la puerta se abra. Una vez que el Señor presenta la solución, no tenemos necesidad de seguir pidiendo: Él ya ha abierto el camino y debemos andar por Él.
La oración involucra a Dios en la vida de hombres y mujeres, y también en los asuntos del gobierno. Por medio de ella, experimentamos unidad con nuestro Padre Celestial y recibimos lo que necesitamos para llevar a cabo Su obra.
El tiempo es de Dios
 
Dios te ama y siempre te amara
 
1Corintios 2:11 En efecto, ¿quién conoce los pensamientos del ser humano sino su propio espíritu que está en él? Así mismo, nadie conoce los pensamientos de Dios sino el Espíritu de Dios.

1Corintios 2:12 Nosotros no hemos recibido el espíritu del mundo sino el Espíritu que procede de Dios, para que entendamos lo que por su gracia él nos ha concedido.
¿Que nos pide Dios?
 
Dios no nos demanda que entendamos su voluntad, sino que la obedezcamos aunque nos parezca poco razonable. Josué 3: 8

1Corintios 1:8 Él os mantendrá firmes hasta el fin, para que seáis irreprochables en el día de nuestro Señor Jesucristo.
¿En quien confias?
 
Confiar en Dios quiere decir, ver más allá de lo que podemos, hacia lo que Dios ve. 2 Reyes 6: 17

Salmo118:8 Es mejor refugiarse en el Señor que confiar en el hombre.
Dios nos espera y siempre nos esperará
 
Apocalipsis 1:8 "Yo soy el Alfa y la Omega," dice el Señor Dios, "el que es, y que era y que ha de venir, el Todopoderoso."

 
Hoy habia 42147 visitantes¡Aqui en esta página!
Si es necesario, Dios moverá cielo y tierra para mostrarnos su voluntad. 2 Crónicas 20: 12 Este sitio web fue creado de forma gratuita con PaginaWebGratis.es. ¿Quieres también tu sitio web propio?
Registrarse gratis